En un suceso que ha sacudido a la comunidad catalana, tres miembros de una misma familia fueron hallados muertos este viernes en dos municipios diferentes de la provincia de Barcelona. Los cuerpos corresponden a un hombre, una mujer, y su hijo, este último siendo el principal sospechoso de los crímenes según las investigaciones preliminares del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
La investigación, liderada por el Juzgado de Instrucción 30 de Barcelona, ha concluido la tarde del viernes con el levantamiento de los tres cadáveres encontrados en dos escenarios distintos: la madre en el distrito de San Martín y el padre junto al hijo en Molins de Rei. La hipótesis principal sostiene un macabro relato de parricidio seguido de suicidio por parte del hijo.
Según fuentes judiciales, no se registran antecedentes ni denuncias previas de violencia o conflictos dentro de esta familia, sumando una capa de misterio y sorpresa a esta tragedia. Los Mossos d’Esquadra descubrieron el primer cuerpo en la vivienda de San Martí durante la mañana, para luego encontrar al padre y al hijo en Molins de Rei, esbozando una secuencia de eventos donde el hijo habría asesinado primero a su madre, luego a su padre, antes de quitarse la vida.
La comisaría general de Investigación Criminal ha tomado las riendas de este caso para dilucidar las circunstancias y motivaciones detrás de estos actos desgarradores. Mientras tanto, la autoridad judicial ha impuesto el secreto de sumario, preservando los detalles de la investigación en curso.