En un trágico accidente en un edificio en rehabilitación en la calle Lezama de Madrid, dos trabajadores han perdido la vida al ser aplastados por una losa de hormigón de ocho toneladas. Los empleados estaban apuntalando la estructura, destinada a convertirse en viviendas para estudiantes, cuando ocurrió el incidente.
Un trágico accidente laboral en el corazón de Madrid
El incidente ocurrió alrededor de las once de la mañana, cuando los trabajadores, identificados como Ngolo, de 50 años y originario de Níger, y Álvaro, un colombiano de unos 30 años, estaban apuntalando el cuarto piso del edificio. Durante estos trabajos, una pesada losa de hormigón se desprendió inesperadamente, cayendo sobre ellos y causando su muerte instantánea.
Un tercer trabajador, Hassan, resultó herido con múltiples fracturas y fue trasladado de urgencia al hospital de La Paz. Describió la escena como rápida y devastadora, marcada por el estruendo del hormigón al ceder. «He visto cómo la losa les ha aplastado; estábamos apuntalando, ha cedido el forjado. No entiendo cómo ha podido suceder», explicó Hassan, visiblemente afectado.
Respuesta de emergencia y reflexiones sobre la seguridad laboral
Los bomberos, junto con equipos de emergencia, trabajaron arduamente en el lugar, enfrentándose a una estructura inestable que complicó las labores de rescate. «Desde el principio, sabíamos que la situación era incompatible con la vida. Ha sido un rescate muy duro, bajo mucha tensión», compartió un portavoz de los bomberos.
Este suceso no solo plantea interrogantes sobre la seguridad en las obras de construcción sino también sobre las medidas preventivas necesarias para proteger a los trabajadores. La comunidad de Fuencarral-El Pardo, donde ocurrió el accidente, y los colegas de las víctimas quedaron conmocionados y lamentan la pérdida de vidas en circunstancias tan trágicas.
El alcalde José Luis Martínez-Almeida y las autoridades locales están revisando las licencias y regulaciones del edificio, asegurando que todo estaba en regla, aunque la investigación sigue en curso para determinar la causa exacta del derrumbe y evaluar las responsabilidades correspondientes.
